Un micro robot que es capaz de volar
Los investigadores de la Universidad de Waterloo, en Ontario, han creado un micro robot que es capaz de volar mediante la utilización de campos magnéticos. Gracias a un arreglo de electroimanes, el pequeño dispositivo de solo un gramo de peso es capaz de moverse en cualquier dirección y girar sobre los tres ejes espaciales.
Un equipo de científicos norteamericanos, pertenecientes a la Universidad de Waterloo (Notario) y liderados por el profesor Mir Behrad Khamesee, ha puesto a punto un pequeño robot que puede volar gracias a un inteligente uso del magnetismo. Según sus creadores, se utilizan una serie de electroimanes para crear un campo magnético parabólico, sobre cuya parte superior se ubica el mini robot. El dispositivo está dotado a su vez de otro grupo de pequeños electroimanes, cuyo campo magnético interactúa con el creado en primer lugar. Las fuerzas resultantes permiten al robot “volar” o girar en cualquier dirección.
“Hemos desarrollado un punto focal de un campo magnético en el espacio, en el que se sostiene el robot”, explica Khamesee . “Al cambiar la ubicación de ese punto focal, mediante el control de la corriente que atraviesa un grupo de bobinas, el micro robot puede desplazarse”, agrega. Este invento, al que sus creadores han descrito detalladamente en un documento titulado “MechMN: Design and Implementation of a Micromanipulation System using a Magnetically Levitated MEMS Robot”, dispone de unas pinzas que pueden abrirse o cerrarse a partir de la aplicación de calor mediante un rayo láser. Cuando están frías, las pinzas permaneces cerradas, pero al calentarse se abren. Esto le proporciona al robot un mecanismo rudimentario pero efectivo para la manipulación de su entorno. Además, se emplean otros haces láser y una cámara para detectar continuamente la posición del aparato en el espacio y corregir la intensidad del campo magnético para que se mantenga en su lugar.
Khamesee cree que el micro robot podrá, algún día, utilizarse para limpiar habitaciones o manipular objetos en entornos peligrosos. Es posible que así sea, pero la necesidad de contar con un campo magnético fijo y muy controlado en el lugar por el que se desplazará el robot seguramente limitará mucho su uso. Si ocurriese un desastre como el de Chernobil, por ejemplo, difícilmente un robot como éste pudiese ser de mucha utilidad, ya que no podría volar por el interior del reactor al no tener instalado previamente su “colchón magnético”. No obstante, hay que tener en cuenta que solo se trata de un prototipo y que la novedosa idea puede ser mejorada en los próximos años.
Los investigadores están muy entusiasmados con su invento. “Puesto que no hay necesidad de cableados y que el robot flota libremente por el aire, puede funcionar dentro de un recinto cerrado mientras que el sistema de control se encuentra fuera”, explica Khamesee. “Se puede trabajar en entornos difíciles, como la manipulación de desechos tóxicos, y puede ser utilizado para llevar a cabo experimentos biológicos peligrosos. Por otra parte, ya que no existen vinculaciones mecánicas, el robot tiene un funcionamiento libre de polvo, apto para aplicaciones de sala limpia.” De hecho, es posible que este último tipo de aplicación sea la ideal para el aparato de Khamesee. Dentro de una planta en la que se fabrican semiconductores, por ejemplo, podrían montarse los electroimanes necesarios para que el robot recorra las instalaciones distribuyendo materiales o manipulando productos.
Como sea, independientemente de las dificultades que plantea la necesidad de una instalación fija sobre la que se desplazará el aparato, se trata de un gran avance en el campo de la robótica. Posiblemente no pueda salir a la calle para comprarnos el periódico pero sí podrá, algún día, ordenarnos la habitación.
Fuentes: www.neoteo.com